Los bachateros en los 80s aun eran mal vistos y solo eran recibidos por una clase social, que era la clase baja. Puesto que en ese momento era una música muy del populacho, de los barrios y de los guardias que la percibían como una música de amargue o desamor. Pocos eran además sus exponentes y la mayoría de sus líricas eran de doble sentido.

Los conciertos de los bachateros en ese tiempo eran muy escasos para no decir inexistentes y si se producían se les incluían a ellos como relleno de los merengueros y baladistas que eran los que tenían éxito en la década de los 80s. No es como ahora en donde Romeo  santos el bachatero del momento hace practicamente una gira de un año.

En la década de los 80s solo bachateros como Paniagua, Blas Durán, entre otros, los que podían considerarse como reconocidos en el ambiente artístico. Todo porque este género estaba muy estereotipado en que era de cabarets de mala muerte y que solo gente de clase baja la escuchaba.

Hoy en día abundan los conciertos de bachateros, no solo en Dominicana, sino en gran parte de América Latina, donde ahora si hay cantantes que le han dado otra connotación al género y que con una mejor estética en las letras y mejores arreglos además de mejor presencia, han lograda sintonizar con otro tipo de gente de clases sociales más altas y que consumen mejor música.